“Aceptando la invitación de los respectivos jefes de Estado y de los obispos, el Santo Padre emprenderá el anunciado viaje apostólico” a la República Democrática del Congo y Sudán del Sur. Así lo ha confirmado este jueves la Oficina de Prensa del Vaticano.

El papa Francisco estará en la ciudad de Kinshasa del 31 de enero al 3 de febrero, y en Juba del 3 al 5 de febrero, en tierras sudaneses, precisamente, estará acompañado por el arzobispo de Canterbury, Justin Welby, y el moderador de la Iglesia de Escocia, Jim Wallace, en una “peregrinación ecuménica de paz”.

El viaje es un una promesa hecha hace años por el Papa Francisco, que tuvo que suspender una visita anunciada para julio pasado.

Francisco había anunciado el viaje él mismo, desde la ventana que da a la Plaza de San Pedro, tras un Ángelus dominical allá por 2019. Sin embargo, la pandemia del COVID-19 y la inestabilidad del país retrasaron la visita.

Sudán del Sur, un país desgarrado por una guerra civil, vio morir violentamente a 400.000 personas como producto de una guerra civil que enfrentó a los ciudadanos entre 2013 y 2019.

El objetivo del viaje sería reforzar la tenue paz forjada por los líderes del país africano tras un retiro espiritual que el arzobispo anglicano Justin Welby y Francisco dirigieron en el Vaticano en 2019.

Sudán del Sur es una nación sin salida al mar que se independizó de Sudán en 2011, lo que la convierte en la más reciente nación soberana con reconocimiento generalizado. Sin embargo, el país ha sido duro básicamente desde entonces: ha soportado una guerra civil caracterizada por los desenfrenados abusos de los derechos humanos, incluyendo varias masacres étnicas y asesinatos de periodistas por parte de todos los bandos.

El conflicto llegó a un final inestable en febrero de 2020, cuando los rivales Salva Kiir Mayardit y Riek Machar formaron un gobierno de coalición, tras alcanzar un acuerdo de unidad en enero, lo que allanó el camino para que los refugiados volvieran a casa. En abril de 2019, Francisco recibió a los líderes sursudaneses y a Welby en el Vaticano para un "retiro".

Sudán del Sur se sumió en una guerra civil dos años después de su independencia del Sudán de mayoría musulmana.

A primera vista, la visita de Francisco a la República Democrática del Congo (RDC) plantea menos problemas de seguridad: Es el mayor país católico de África, con unos 35 millones de católicos, pero dado el aumento de la población del país, será más del doble de ese total a mediados de siglo, convirtiéndose también en la mayor nación católica francófona del mundo, muy por delante de la propia Francia, con una previsión de 49 millones de católicos.

Con una superficie que equivale aproximadamente a toda Europa Occidental, la RDC también es rica en recursos naturales. Representa el 17% de la producción mundial de diamantes, mientras que su cinturón de cobre contiene el 34% del cobalto del mundo y el 10% del cobre. Está entre las diez primeras naciones productoras de petróleo. Kivu del Norte y del Sur, en la parte oriental del país, albergan entre el 60 y el 80% de las reservas mundiales de coltán, utilizado en la fabricación de teléfonos móviles, ordenadores y otros equipos electrónicos.

Sin embargo, en el oeste del Congo, los miembros de los grupos Batende y Banunu están atrapados en un ciclo mortal de violencia étnica que ha dejado cientos de muertos. En el este, numerosos grupos armados -según algunas estimaciones, hasta 116- operan con casi total impunidad. El número de muertos se cuenta por miles, pero el hecho de que se haya convertido en una zona sin ley en la que el Estado existe de nombre hace que la cifra sea difícil de precisar.

La asombrosa cifra de 5,5 millones de congoleños están clasificados como desplazados internos, y un millón están registrados como refugiados y solicitantes de asilo en 20 países, y alberga la tercera mayor población de pobres del mundo, sólo por detrás de India y Nigeria. Aproximadamente el 80% de la población del país vive con menos de 1,25 dólares al día.

De ahí que tenga sentido que el pontífice argentino, que ha hecho de la paz y la lucha contra la pobreza dos de los pilares sociales de su papado, quiera visitar ambos países juntos. Ningún Papa ha visitado nunca Sudán del Sur, y será la primera vez desde la visita de Juan Pablo II en 1985 que un Papa vaya a la RDC.

El papa Francisco ha realizado cuatro visitas a África desde su elección en 2013: Kenia, Uganda y la República Centroafricana en 2015; Egipto en 2017; y dos veces en 2019, visitando primero Marruecos y luego una visita de una semana que incluyó Mozambique, Madagascar y Mauricio.