El papa Francisco recibió este jueves audiencia privada al presidente chileno, Sebastián Piñera. El encuentro de una hora fue el segundo de ambos en el Vaticano. La visita tuvo lugar en el marco de la gira europea del mandatario latinoamericano.
Como es tradición cuando un jefe de estado visita al Santo Padre, después del encuentro privado, Piñera fue también recibido por el secretario de Estado vaticano, el cardenal Pietro Parolin y con el secretario para las Relaciones con los Estados, Mons. Paul Richard Gallagher.
Durante el coloquio, el papa y el presidente hablaron, entre otras cosas, por el proceso de reforma de la Constitución emprendido en Chile, y las relaciones entre la Iglesia católica y el Estado.
Según un comunicado de la Sala de Prensa de la Santa Sede, “en el transcurso de las cordiales conversaciones, se expresó la satisfacción por las buenas relaciones bilaterales existentes, así como por el compromiso común en favor de la paz, la justicia social y la protección de los pobres, los marginados y las personas más vulnerables”.
Durante el habitual intercambio de regalos, el presidente entregó al pontífice argentino un tablero de ajedrez realizado con combarbalita, una roca semipreciosa, única en el mundo, que abunda en Combarbalá, en el norte de Chile.
Mientras que el papa entregó a Piñera un azulejo grabado con la imagen de San Pedro, los documentos principales de su pontificado y el último mensaje para la Jornada de Oración por la Paz.
Esta es la tercera vez que Francisco y Piñera interactúan. La primera se produjo durante la visita del papa a Chile en enero de 2018, durante el discurso del argentino ante las autoridades civiles- cuando la presidenta era aún Michelle Bachelet. Posteriormente, se encontraron en el Vaticano el 13 de octubre de 2018. Esta reunión estuvo marcada sobre todo por el escándalo de los casos de pederastia y encubrimiento en el clero chileno.
“Se habló de la situación interna del país, prestando especial atención al desarrollo socioeconómico, al proceso de reforma de la Constitución y a las relaciones con la Iglesia Católica”, afirma el comunicado. También “se manifestó el deseo de una colaboración serena, habida cuenta de la contribución que ofrece al bien de toda la población en los ámbitos caritativo, educativo y social, especialmente en este período crítico de la pandemia”.
El comunicado de prensa finaliza destacando que “las conversaciones también permitieron intercambiar puntos de vista sobre algunos temas relacionados con la actualidad internacional y regional y a la promoción de la paz y de los derechos humanos en el mundo”.
Piñera llegó al Vaticano acompañado por el canciller, Andrés Allamand, y el embajador de Chile ante la Santa Sede, Octavio Errázuriz. Después de las reuniones oficiales, acudió a los Jardines vaticanos para visitar el lugar donde en el mes de junio se colocó un mosaico dedicado a la Virgen del Carmen, patrona de Chile.
El mosaico es una obra la artista Francisca Claro, hecha con piedras recogidas a lo largo de todo el territorio chileno, y que fue bendecido en una ceremonia presidida por el cardenal Giuseppe Bertello, Gobernador del Estado de la Ciudad del Vaticano. Estuvieron presentes en esa oportunidad el cardenal Celestino Aós, arzobispo de Santiago de Chile, quien bendijo la imagen, y el obispo auxiliar, Alberto Lorenzelli.
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