El obispo Gabriel Dunia de Auchi, Nigeria, en una foto sin fecha, ha pedido a todos los sacerdotes de la diócesis que celebren misas, ofrezcan la bendición y guíen a los fieles en el rezo del rosario por la protección divina en todo el estado de Edo y en Nigeria, después de que unos hombres armados asaltaran el Seminario Menor de la Inmaculada Concepción en su diócesis la noche del 10 de julio de 2025, matando a un agente de seguridad y secuestrando a tres seminaristas. (OSV News/Cortesía de la diócesis de Auchi)
AUCHI, Nigeria -- En el estado nigeriano de Edo, hombres armados irrumpieron en el Seminario Menor de la Inmaculada Concepción, perteneciente a la Diócesis de Auchi, la noche del 10 de julio. Asesinaron a un agente de seguridad y secuestraron a tres seminaristas, según Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN por sus siglas en inglés).
ACN "condena enérgicamente el ataque mortal perpetrado contra un seminario en Nigeria", declaró la organización en un comunicado el 11 de julio.
Según la Diócesis Católica de Auchi, varios hombres armados irrumpieron en las instalaciones del seminario y abrieron fuego.
Christopher Aweneghieme, miembro del Cuerpo de Defensa Civil de Nigeria asignado al seminario, murió en el asalto. Tres seminaristas menores fueron secuestrados y llevados a un bosque cercano, mientras que los estudiantes restantes fueron reubicados temporalmente en un lugar seguro mientras se reforzaban los protocolos de seguridad.
ACN, fundación pontificia que apoya a las iglesias locales de todo el mundo que luchan contra la persecución religiosa, declaró en un comunicado de prensa del 11 de julio que se unía a la Diócesis de Auchi en el duelo por la pérdida del Sr. Aweneghieme y en ferviente oración por la pronta y segura liberación de los seminaristas secuestrados.
"Nos solidarizamos con las familias afectadas y la comunidad cristiana, que sigue sufriendo las consecuencias de la violencia y la inestabilidad", declaró.
El obispo Gabriel Dunia de Auchi ha instado a todos los sacerdotes de la diócesis a celebrar misas, ofrecer la bendición y dirigir a los fieles en el rezo del rosario para pedir la protección divina en todo el estado de Edo y Nigeria.
Al describir el ataque en un mensaje enviado a ACN, publicado el 15 de julio, declaró: "Llegaron en gran número y a los guardias les fue imposible detenerlos". Añadió que la diócesis está en contacto con los agresores a través de mediadores.
El obispo confirmó que los seminaristas secuestrados tienen entre 14 y 17 años, y que toda la comunidad del seminario (estudiantes y profesores) ha sido evacuada a parroquias cercanas hasta que se refuercen las medidas de seguridad y se levante una valla protectora alrededor del recinto.
Aunque ya se ha contactado con los secuestradores, pagar un rescate elevado no es viable. "Los estudiantes y sus familias viven en extrema pobreza, y la propia Diócesis de Auchi depende de la ayuda externa, incluida la de ACN, para cubrir los gastos básicos de la formación sacerdotal", declaró el obispo Dunia. Además, las autoridades eclesiásticas en Nigeria siguen una política oficial de no pagar rescates, en parte para evitar nuevos secuestros.
El Seminario Menor de la Inmaculada Concepción, fundado en 2006, ha formado a más de 500 estudiantes para el sacerdocio y "sigue siendo un faro de esperanza para la comunidad católica local", declaró ACN.
Instó a "todas las personas de buena voluntad a unirse a los fieles en oración" por el descanso del alma de la víctima y "por la liberación ilesa de los seminaristas secuestrados".
Nigeria, el país más poblado de África, sufre una violencia letal en varias zonas del país, a manos de grupos terroristas internacionalmente reconocidos como Boko Haram, pastores fulani, bandidos o bandas principalmente islámicas.
Estos grupos han invadido tierras de cultivo, amenazando a los propietarios de las fincas y expulsando a los cristianos. Los analistas han descrito esta persecución como lenta pero silenciosa, que hasta ahora las autoridades no han clasificado como terrorismo.
A mediados de junio, tras una escena de horror en la que unas 200 personas fueron brutalmente asesinadas en Yelwata, estado de Benue, Nigeria, el Papa León XIV oró por las víctimas, calificándola de "terrible masacre".
A principios de junio, al menos 85 personas fueron asesinadas en oleadas coordinadas de ataques en una semana en el estado de Benue. La Iglesia nigeriana también está sufriendo numerosos secuestros de sacerdotes.
El padre Alfonso Afina, asignado a varias parroquias en Alaska desde septiembre de 2017 hasta 2024, fue secuestrado el 1 de junio en Nigeria, su país natal, junto con un número indeterminado de compañeros de viaje mientras se encontraba en el estado nigeriano de Borno, cerca de la ciudad nororiental de Gwoza. Fieles de dos continentes rezan por su regreso sano y salvo. Hasta el 17 de julio el permanecía secuestrado.
En diciembre, la Oficina Nacional de Estadística de Nigeria publicó un informe que mostraba que más de dos millones de personas habían sido secuestradas tan solo entre mayo de 2023 y abril de 2024, con 600.000 nigerianos asesinados y un pago de rescate de unos 1.420 millones de dólares (un promedio de 1.700 dólares por incidente) durante ese período.
A pesar de la persecución continua, el 94% de los nigerianos que se autoidentifican como católicos encuestados afirmaron asistir a misa semanal o diariamente, según un estudio publicado a principios de 2023 por el Centro para la Investigación Aplicada en el Apostolado de la Universidad de Georgetown.
En su declaración a ACN, el obispo Dunia hizo un emotivo llamamiento a la solidaridad, tanto en Nigeria como a nivel internacional: "Hago un llamamiento a todos, a cada persona, para que nos ayuden: a que recen por nosotros, a que hagan cualquier esfuerzo, sea cual sea -- material, espiritual o humano --, que nos ayude a contener la inseguridad. Nuestros esfuerzos locales se están viendo desbordados", declaró.
El obispo también expresó su frustración por la falta de protección concreta por parte de las autoridades locales.
"Estamos pidiendo al gobierno civil que acuda al lugar", declaró el obispo Dunia.
"Nos aseguraron que se quedarían para proteger la zona. Pero hasta ahora no hemos visto ninguna acción concreta".
Aunque aún se desconocen los motivos exactos de los atacantes, el obispo Dunia declaró a ACN que la situación en su diócesis, ubicada al suroeste de Abuya, capital de Nigeria, es preocupante desde hace tiempo. Este no es el primer ataque contra el Seminario Menor de la Inmaculada Concepción. En marzo de 2025, el rector del seminario fue secuestrado y uno de los seminaristas fue asesinado.
Estos repetidos ataques ponen de relieve las amenazas sistemáticas que enfrentan cada vez más las instituciones cristianas en Nigeria. Según el prelado, los atacantes provienen del norte y se cree que pertenecen a la etnia fulani.
"Ni siquiera sabemos con certeza qué pretenden. Pero observamos un patrón creciente de ataques contra las comunidades e instituciones cristianas", declaró el obispo, quien expresó su preocupación por la posibilidad de que se trate de un intento de ocupación de tierras o de expulsar a la comunidad cristiana de la zona.