El Papa Francisco hizo un llamado a actuar de forma urgente e inmediata para cambiar la relación del hombre con el medioambiente y frenar la degradación de la naturaleza; y advirtió que “continuar por el camino de explotación y destrucción, del ser humano y de la naturaleza, es injusto e imprudente”.
En un mensaje que pronunció este viernes 4 de junio con motivo del inicio de la Década de Restauración de los Ecosistemas convocado por las Naciones Unidas, el Pontífice destacó que “esta conmemoración anual nos anima a recordar que todo está interconectado”.
El Papa afirmó que esta iniciativa “nos invita a asumir compromisos para diez años destinados a cuidar nuestra casa común”.
En ese sentido, citó uno de los Salmos de la Biblia donde “podemos leer: ‘El cielo proclama la gloria de Dios y el firmamento anuncia la obra de sus manos; un día transmite al otro este mensaje y las noches se van dando la noticia. Sin hablar, sin pronunciar palabras, sin que se escuche su voz’”.
“Formamos parte de este regalo de la creación. Formamos parte de la naturaleza, no estamos separados de ella. Eso es lo que trata de decirnos la Biblia”, afirmó Francisco.
Explicó que “la actual situación medioambiental nos llama a la acción inmediata con urgencia para hacernos administradores de la creación más responsables y restaurar la naturaleza que estamos dañando y explotando desde hace demasiado tiempo”.
De lo contrario, “nos arriesgamos a destruir la misma base de la que dependemos. Nos arriesgamos a inundaciones, hambrunas, y otras serias consecuencias para nosotros y las generaciones futuras”.
“Necesitamos cuidarnos unos a otros y a los más débiles de entre nosotros. Continuar por este camino de la explotación y de la destrucción, del ser humano y de la naturaleza, es injusto e imprudente. Esto es lo que una conciencia responsable nos dice. Tenemos la responsabilidad de hacer un hogar común habitable para nuestros hijos y para las generaciones futuras”.
Sin embargo, “cuando miramos a nuestro alrededor, ¿qué es lo que vemos? Vemos una crisis que nos lleva a otra crisis. Vemos destrucción de la naturaleza, así como una pandemia mundial que ha provocado millones de muertes de personas. Vemos las consecuencias injustas de muchos aspectos de nuestros actuales sistemas económicos y numerosas crisis climáticas catastróficas que producen graves efectos en las sociedades humanas y especies en extinción”.
Por ello, pidió realizar “esfuerzos dirigidos a promover lo que podemos llamar una ‘ecología integral’, que es un concepto complejo y multidimensional que nos llama a tener una visión a largo plazo”. “Tiene como objetivo restaurar los diferentes niveles de equilibrio estableciendo dentro de nosotros una armonía con los demás, con la naturaleza y con los otros seres vivos”. “Nos hace conscientes de nuestra responsabilidad como seres humanos hacia nosotros mismos, hacia el prójimo, hacia la creación y hacia el Creador”.
Invitó también a repensar la economía porque “la degradación de los ecosistemas es una consecuencia clara de una disfunción económica”.
Finalmente, subrayó que “restaurar la naturaleza que hemos dañado significa, en primer lugar, restaurarnos a nosotros mismos”.