MANAGUA, Nicaragua -- Líderes de la Iglesia en Nicaragua dijeron que "la situación política y social de Nicaragua no continuar igual", ya que el país marca un bicentenario empañado por la represión política, la migración masiva y una respuesta escandalosa ante la pandemia de COVID-19.

Un documento publicado antes del bicentenario del 15 de septiembre por la comisión de justicia y paz de la Arquidiócesis de Managua dijo que la iglesia "quiere ser una voz de aliento, ilusión y esperanza" en Nicaragua.

También tienen esperanza de una " patria donde se respeten los derechos humanos, la libertad de pensar y opinar diferente, donde juntos podamos levantar una economía que produzca bienestar para todos, sin leyes que repriman las iniciativas independientes y se respete el pluralismo social y político...donde no exista temor a elecciones libres, transparentes y competitivas, ni existan presos políticos ni medios de comunicación clausurados o impedidos de informar".

Lamentablemente, la comisión dijo: " Tenemos décadas de confrontaciones que han generado desempleo, pobreza generalizada, inseguridad ciudadana, exilio forzado, desatención eficiente a la educación y a la salud".

Los países de Centroamérica celebran las fiestas patrias el 15 de septiembre, marcando la independencia de la región de España en 1821. Pero la ocasión llega en medio de la incertidumbre: la región está plagada de retrocesos democráticos, respuestas pobres a la pandemia y poblaciones empobrecidas que huyen de Centroamérica.

"No hay nada que celebrar", dijo Mons. Carlos Áviles, portavoz de la Arquidiócesis de Managua. " No tenemos independencia de ningún tipo. Todavía es un ideal".

Nicaragua llega a su bicentenario en medio de la represión política mientras el régimen del presidente Daniel Ortega encarcela a posibles oponentes antes de las elecciones de noviembre.

El régimen ha encarcelado a manifestantes y ha sitiado iglesias que celebran servicios para las familias de los presos políticos. La iglesia misma ha sido vista como un oponente político, mientras que las homilías de obispos prominentes atraen una enorme atención de medios independientes.

"Vamos a seguir diciendo la verdad", dijo Mons. Áviles.

La conferencia de obispos nicaragüenses también emitió una declaración del bicentenario, pidiendo la unidad y diciendo que el país "necesita reavivar la esperanza".

"Hoy necesitamos, más que nunca, autoridades lúcidas, sabias y respetadas que sepan conducirnos por caminos de amistad cívica, de diálogo tolerante y respetuoso, de búsqueda del bien común por sobre los intereses personales o partidistas y así encontrar sendas de justicia y paz social", dijeron los obispos.