CIUDAD DEL VATICANO -- La vergüenza y el dolor son respuestas iniciales apropiadas al informe sobre el alcance del abuso sexual clerical en Francia. Sin embargo, la Iglesia Católica debe actuar para proteger a los niños y garantizar justicia para las víctimas y sobrevivientes, expresó el arzobispo Charles J. Scicluna.
"Debemos pasar del duelo a una determinación y convicción renovadas para actuar", indicó a Vatican News el 7 de octubre el arzobispo Scicluna, quien es secretario adjunto de la Congregación para la Doctrina de la Fe e investigador principal de casos de abuso del Vaticano.
"Debemos entender que las víctimas -- quienes han sufrido abusos, humillaciones, e incluso el trauma de un encubrimiento institucional -- son parte de nosotros", señaló. "Por lo tanto, debemos actuar de una manera más decidida y positiva".
El informe, publicado el 5 de octubre por la Comisión Independiente sobre Abuso Sexual en la Iglesia Católica en Francia, que cuenta con 21 miembros, estimó que 330,000 niños en Francia habían sido abusados por sacerdotes u otros empleados de la iglesia desde la década de 1950.
La conmoción, la vergüenza, y el dolor son reacciones iniciales apropiadas, dijo el arzobispo Scicluna, pero obviamente se debe hacer más.
El primer paso es fortalecer la educación, acotó. Las familias, los jóvenes, los candidatos al sacerdocio y los propios sacerdotes deben estar capacitados "para identificar situaciones peligrosas, para identificar a personas que podrían abusar de alguien. Repito, en este ámbito la capacitación es fundamental".
"Después, necesitamos la determinación para reaccionar con claridad ante una denuncia de abuso. Debemos estar convencidos de que nunca debemos encubrir una denuncia hecha de buena fe, sino proceder a su seguimiento, porque ahora tenemos las herramientas legislativas adecuadas" en la ley de la iglesia, expresó.
Si bien el arzobispo Scicluna dijo que la gente no puede ignorar cuánto ha hecho la iglesia para actualizar sus leyes y procedimientos para proteger a niños y adultos vulnerables, para hacer que los abusadores y sus superiores rindan cuentas y garantizar justicia y asistencia a las víctimas, se necesita un mayor compromiso para ponerlos en práctica.
Vatican News señaló que Jean-Marc Sauvé, quien dirigió la investigación francesa, "expresó la esperanza de que, a partir de ahora, en casos de abuso, la práctica canónica posibilite juicios más justos y que las víctimas sean informadas sobre el progreso de dichos juicios".
Monseñor Scicluna dijo que ha hecho una sugerencia similar, y "también recibí recientemente una invitación para participar en un seminario organizado por la Comisión Pontificia para la Protección de Menores, dedicado precisamente a los derechos de las víctimas en los procesos canónicos, para un estudio comparativo para poder comprender exactamente cómo actúan en otras jurisdicciones civiles y poder sugerir prácticas útiles en derecho canónico".
El motu proprio del papa Francisco de 2019, "Vos Estis Lux Mundi" ("Ustedes son la luz del mundo"), indicó, ordenó que "una vez que se inicie una investigación contra un miembro del clero acusado de abuso, quienes la conduzcan deben notificar al representante de la víctima del final del proceso y también el resultado de dicha investigación".
La oficina de prensa de la comisión pontificia se negó a proporcionar detalles sobre el seminario.