En un intento por fortalecer la lucha contra los abusos desde el Vaticano, el Papa Francisco modificó la estructura de la Congregación para la Doctrina de la Fe (CDF), el antiguo Santo Oficio, dividiéndolo en una sección Doctrinal y una Disciplinar.

El lunes, Francisco recordó que “custodiar la fe es la tarea principal” de la CDF, que siempre tuvo competencias tanto doctrinarias como disciplinarias.

“Pero ahora, considerada la experiencia que ha madurado en este tiempo en diversos ámbitos de trabajo y la exigencia de darle una impostación más apta a las funciones que le son propias”, consideró oportuno establecer un cambio de la estructura interna.

La decisión de Francisco fue anunciada el lunes por el Vaticano, con la promulgación de un “motu propio”, un documento papal. La estructura de la congregación se modifica, se lee en la norma, “ante la necesidad de darle un enfoque más adecuado al cumplimiento de las funciones".

La publicación del motu propio parecería indicar que la nueva constitución apostólica, redactada con la ayuda del congreso de cardenales que asesora al Papa Francisco en la reforma del gobierno de la Iglesia, está aún siendo revisada por el pontífice, que la recibió en el primer trimestre de 2021.

La Sección Disciplinar

La Sección Disciplinar se ocupará de los delitos reservados a la Congregación y tratados a través del Supremo Tribunal Apostólico, incluidos los abusos contra menores por parte del clero.

La tarea de la esta nueva sección es “preparar y elaborar los procedimientos previstos por las normas canónicas para que la Congregación, en sus diversas instancias (prefecto, secretario, promotor de justicia, congreso, sesión ordinaria, colegio para el examen de los recursos en materia de ‘delicta graviora’), pueda promover una correcta administración de justicia”, señala el Papa.

Para ello, el área disciplinaria “promueve iniciativas de formación adecuadas” ofrecidas a los obispos y a los juristas, “con el fin de favorecer una correcta comprensión y aplicación de las normas canónicas relativas a su ámbito de competencia”, explica Francisco.

En los últimos veinte años el 90% del trabajo de la CDF, lejos de estar en temas teológicos referentes a la doctrina, fue de tipo canónico, justamente para investigar, juzgar y sancionar situaciones como son los abusos de menores por parte de sacerdotes. La cantidad de casos, y el insuficiente número de personas capacitadas dentro de la Congregación para lidiar con las denuncias, llevaron a que los casos se acumulen y muchas víctimas esperen años antes de obtener una respuesta.

Aunque el Papa no habla específicamente de los abusos, es claro que fue esta crisis la que llevó a la subdivisión de la Congregación, liderada por el Cardenal español Luis F. Ladaria. Así, una parte se ocupará de los “asuntos relativos a la promoción y protección de la doctrina de la fe y la moral" de la relativa a las "infracciones".

De esta manera, la sección Doctrinal estará dedicada "a todos los asuntos relativos a la promoción y protección de la doctrina de la fe y la moral y a los estudios destinados a desarrollar la comprensión y la transmisión de la fe al servicio de la evangelización".

La Congregación recibe y juzga las acusaciones de abuso desde 2001, cuando el entonces prefecto, el Cardenal Joseph Ratzinger- hoy Papa emérito Benedicto XVI- tomó la decisión de que así fuera. Durante los últimos dos años de su pontificado, la CDF expulsó a unos 400 hombres del sacerdocio.

La Sección Doctrinal

Por su parte, la Sección Doctrinal se ocupará de los “asuntos relativos a la promoción y protección de la doctrina de la fe y la moral. También promueve estudios destinados a incrementar la comprensión y la transmisión de la fe al servicio de la evangelización, para que su luz sea un criterio de comprensión del sentido de la existencia, sobre todo ante los interrogantes que plantean el progreso de las ciencias y el desarrollo de la sociedad”.

Asimismo, examina los documentos que van a ser publicados por otros dicasterios, así como los escritos y opiniones que “parecen problemáticos para la recta fe, fomentando el diálogo con sus autores y proponiendo remedios adecuados”.

A esta sección también pertenecerá la Oficina Matrimonial, que ha sido creada para examinar, todo lo que se refiere al "privilegium fidei", es decir a las anulaciones matrimoniales.