CIUDAD DEL VATICANO -- Aunque los sentimientos o impulsos intensos -- las pasiones -- son naturales, los cristianos saben que estos impulsos deben ser domados y canalizados hacia el bien, dijo el Papa Francisco.

La virtud de la fortaleza, "la más combativa de las virtudes", ayuda a una persona a controlar sus pasiones, pero también le da la fuerza para superar el miedo y la ansiedad cuando se enfrenta a las dificultades de la vida, dijo el Papa a los visitantes y peregrinos en su audiencia general semanal del 10 de abril.

Continuando con su serie de catequesis sobre las virtudes, el Papa citó el Catecismo de la Iglesia Católica: "La fortaleza es la virtud moral que, en las dificultades, asegura la firmeza y la constancia en la búsqueda del bien. Reafirma la decisión de resistir a las tentaciones y de superar los obstáculos en la vida moral. La virtud de la fortaleza hace capaz de vencer el temor, incluso a la muerte, y de hacer frente a las pruebas y a las persecuciones".

La fortaleza se "toma en serio el desafío del mal en el mundo", dijo, y eso es cada vez más raro "en nuestro cómodo occidente".

Algunas personas pretenden que el mal no existe, "que todo está bien, que la voluntad humana a veces no es ciega, que en la historia no luchan fuerzas oscuras portadoras de muerte", dijo el Papa. Pero leer un libro de historia o incluso periódicos muestran "los horrores de los que somos en parte víctimas y en parte protagonistas: guerras, violencia, esclavitud, opresión de los pobres, heridas que nunca han cicatrizado y que aún sangran".

"La virtud de la fortaleza nos hace reaccionar y gritar 'no', un 'no' rotundo a todo esto", dijo.

La fortaleza, dijo, ayuda a los cristianos a decir "'no' al mal y 'no' a la indiferencia; 'sí' al camino que nos hace progresar, y para ello debemos luchar".

"Un cristiano sin valentía, que no doblega sus propias fuerzas al bien, que no molesta a nadie, es un cristiano inútil", afirmó.

Al final de la audiencia, el Papa Francisco pidió rezar por Ucrania y Palestina e Israel. "¡Que el Señor nos dé la paz! La guerra está en todas partes", dijo. "No olvidemos Myanmar", donde los militares dieron un golpe de Estado en 2021 y los combates han continuado desde entonces.

"Pidamos al Señor la paz y no olvidemos a estos hermanos y hermanas nuestros que tanto sufren en estos lugares de guerra".