CIUDAD DEL VATICANO — "Toda la situación es muy grave", dijo el papa León XIV a los periodistas después de que Israel lanzara un ataque contra líderes de Hamás en Catar.
"En estos momentos, hay noticias muy serias de un ataque israelí contra algunos líderes de Hamás, pero en Catar", dijo el pontífice el 9 de septiembre. Catar, ubicado en el golfo Pérsico, ha intentado mediar para poner fin a la guerra entre Israel y Hamás. Su capital es Doha.
"Toda la situación es muy grave", repitió el papa a los reporteros que lo esperaban cuando salía de Castel Gandolfo para regresar al Vaticano.
Danny Danon, embajador de Israel ante las Naciones Unidas, publicó en X: "El ataque preciso en Doha tuvo como objetivo a líderes de alto rango de Hamás que planearon la masacre del 7 de octubre y celebraron mientras secuestraban a nuestros ciudadanos. Felicito a nuestras fuerzas de seguridad por esta operación valiente y precisa. No hay escondite para los terroristas, y seguiremos persiguiéndolos en todas partes".
Pero António Guterres, secretario general de la ONU, declaró en una conferencia de prensa en Nueva York: "Apenas estamos conociendo los ataques israelíes en Catar, un país que ha desempeñado un papel muy positivo para lograr un alto el fuego y la liberación de todos los rehenes".
"Condeno esta flagrante violación de la soberanía e integridad territorial de Catar", afirmó Guterres.
El papa León también dijo a los periodistas reunidos frente a la Villa Barberini en Castel Gandolfo que acababa de intentar llamar a la Parroquia de la Sagrada Familia en la Ciudad de Gaza, la única iglesia católica de rito latino en la Franja.
"Acabo de intentar llamar al párroco, pero no tengo noticias", dijo el pontífice. Aviones israelíes lanzaron folletos sobre la Ciudad de Gaza por la mañana, advirtiendo de un nuevo ataque y alentando a los civiles a evacuar.
Los sacerdotes tanto del complejo de la Iglesia Ortodoxa Griega de San Porfirio como de la Iglesia de la Sagrada Familia se han negado previamente a evacuar, ya que brindan refugio a cientos de civiles, incluidos ancianos y niños, que no tienen a dónde ir.
Ambos complejos eclesiales han sido dañados por las fuerzas israelíes —San Porfirio en octubre de 2023, y la Sagrada Familia en diciembre de 2023 y en julio de este año. El ejército israelí ha dicho que los ataques fueron involuntarios.
"Tenemos que rezar mucho", dijo el papa León.
