El Papa Francisco lleva mucho tiempo lamentando que no puede pasearse por la ciudad sin que nadie lo note, como solía hacer por las calles de Buenos Aires antes de convertirse en Papa. Sin embargo, parece haber conservado su sentido del humor: después de haber sido captado por las cámaras haciendo una visita no anunciada- y completamente persona- a una tienda de discos de Roma esta semana.
Francisco escribió una nota al reportero Vaticanista que por casualidad estaba en el lugar correcto en el momento adecuado el martes por la noche cuando Francisco se escabulló del Vaticano para bendecir la tienda Stereo Sound, recientemente renovada, cerca del Panteón.
Javier Martínez-Brocal, director de la agencia de noticias Rome Reports, filmó a Francisco saliendo de la tienda, en unas imágenes que se hicieron virales y que incluso fueron publicadas en el periódico oficial de la Santa Sede L'Osservatore Romano.
Martínez-Brocal escribió al Papa una nota después de haber publicado la primicia, explicando que no era un paparazzo y lamentando que Francisco ya no pueda pasar desapercibido. Pero el reportero también le dijo que la historia proporcionó una dosis muy necesaria de buenas noticias para un mundo inundado de tragedias.
"No voy a negar que fue bruta sorte (mala suerte) que después de tomar todas las precauciones, hubiera un periodista esperando a una persona en la parada de taxis", respondió Francisco. Pero añadió: "No hay que perder el sentido del humor".
Escribiendo con su característica letra minúscula, el Papa reconoció que lo que más echa de menos es no poder caminar por las calles de la ciudad como solía hacer en Buenos Aires. El ex cardenal Jorge Mario Bergoglio era conocido por tomar el transporte público para recorrer la capital argentina.
Francisco reconoció que Martínez-Brocal sólo estaba haciendo su trabajo como periodista cuando grabó el evento. "Gracias por hacer su vocación, aunque ponga en dificultades al Papa", bromeó.
Los dueños de la tienda le contaron al experimentado reportero que mucho antes de ser elegido Papa el 13 de marzo de 2013, el entonces cardenal Jorge Mario Bergoglio solía ser un visitante habitual de Stereo Sound.
Los propietarios llegaron a discutir delante del periodista porque no recordaban si era, de hecho, cardenal o arzobispo cuando entró por primera vez a la tienda.
Francisco, conocido por su afición a la música, sobre todo al tango argentino, no compró nada durante la visita del lunes, que tuvo lugar alrededor de las 20:00 horas locales. Sin embargo, los propietarios se negaron a que se fuera con las manos vacías y le regalaron un CD de música clásica.
"El Papa estuvo en la tienda durante 12 minutos", dijo Martínez Brocal. "Vi que bendijo a una señora, a la dueña, a su hija y a su yerno. Habló con ellos, los escuchó. La hija sacó un CD envuelto en azul antes de que se fuera".
En su propio relato de los hechos, Martínez Brocal escribe que los dueños de la tienda se negaron a hablar con él al principio, pero "poco a poco" compartieron algunos pequeños detalles, como que era un antiguo cliente, pero que no había tenido la oportunidad de volver desde su elección al papado.
