CIUDAD DEL VATICANO -- La iglesia católica "acoge y fomenta la pasión por la investigación científica como expresión del amor por la verdad y por el conocimiento del mundo", expresó el papa Francisco a miembros de la Pontificia Academia de las Ciencias.
La investigación y los descubrimientos científicos deben llevar al asombro ante la presencia de Dios, quien creó el mundo y la inteligencia humana, pero también deben conducir a un mayor compromiso con la paz y el desarrollo humano, afirmó el Santo Padre a científicos el 10 de septiembre.
Los 80 académicos, que incluyen decenas de ganadores de premios Nobel, provienen de los campos de la astronomía, la química, las matemáticas, la física, la biología, la medicina, la botánica, la zoología, la genética, y la fisiología, entre otras especialidades. Los miembros se eligen en función de sus logros científicos, no de sus creencias religiosas, y estudian temas de interés para el Vaticano.
"Hasta donde yo sé, ninguna otra institución religiosa tiene tal academia", dijo el papa a los miembros, pero "muchos líderes religiosos han expresado interés en establecer una".
Establecida en 1603, la academia demuestra el compromiso de la iglesia con la verdad y el aprendizaje sobre "la vida en todo su esplendor sinfónico", manifestó el Sumo Pontífice.
La ciencia debe conducir a una mayor apreciación de la creatividad de Dios, acotó, pero también debe conducir a un mayor compromiso de las personas para proteger el mundo que Dios creó y ayudar a las personas que Dios creó.
En los últimos años, dijo, miembros de la academia han utilizado sus conocimientos e investigaciones interdisciplinarias para opinar sobre la lucha contra el hambre, la protección de océanos y mares, la promoción del desarrollo sostenible en barrios pobres, y para solicitar una respuesta justa y amplia a la crisis sanitaria provocada por la pandemia del coronavirus.
La sesión plenaria de 2022 de la academia, del 8 al 10 de septiembre, se dedicó a explorar el tema "Ciencia básica para el desarrollo humano, la paz, y la salud planetaria", un tema que, según el papa Francisco, exploraba los descubrimientos científicos recientes "sobre la tierra, el universo, y el lugar de los seres humanos dentro de ella".
"Los resultados positivos de la ciencia en el siglo XXI dependerán, en gran medida, de la capacidad de los científicos para buscar la verdad y aplicar los descubrimientos de manera que se desarrolle a la par de la búsqueda de lo justo, lo noble, lo bueno, y lo bello", indicó el papa Francisco a los académicos.
La paz es una necesidad urgente hoy y por la cual los científicos tienen una responsabilidad particular, dijo al grupo.
"En nombre de Dios, que creó a todos los seres humanos para un destino común de felicidad, estamos llamados hoy a dar testimonio de nuestra vocación fraterna a la libertad, la justicia, el diálogo, el encuentro mutuo, el amor y la paz, y a evitar el odio, el resentimiento, división, violencia, y guerra", expresó.
Dijo al grupo que también estaban llamados "a la conversión ecológica", para "salvar nuestro hogar y vida común y el de las generaciones futuras, en lugar de aumentar la desigualdad, la explotación, y la destrucción".