El Papa Francisco destacó este 6 de agosto, día en que la Iglesia Católica celebra la fiesta de la Transfiguración del Señor, que estamos llamados a llevar la luz de Cristo “y hacerla brillar en todas partes” para transmitir amor y esperanza.
Así lo dijo el Santo Padre a través de un mensaje de su cuenta oficial de Twitter @Pontifex_es en el que recordó que esta fiesta “nos recuerda que estamos llamados a vivir el encuentro con Cristo” y para que “iluminados por su luz” podamos ser “como pequeñas lámparas del Evangelio”.
“La fiesta de la Transfiguración del Señor nos recuerda que estamos llamados a vivir el encuentro con Cristo, para que iluminados por su luz, podamos llevarla y hacerla brillar en todas partes, como pequeñas lámparas del Evangelio que llevan un poco de amor y de esperanza”, escribió el Papa.
El episodio de la Transfiguración del Señor está relatado en los tres Evangelios sinópticos (Lc 9, Mc 9, Mt 17) y relata cuando Jesús se aparta al monte con los apóstoles Juan, Pedro y Santiago.
Entre los muchos aspectos a destacar del relato, hay dos cuestiones que definen el momento: la conversación de Jesús con Moisés y Elías, y la voz de Dios que irrumpe desde una nube diciendo “este es mi Hijo, el amado, mi predilecto. Escúchenlo.”
El relato evangélico describe que la Transfiguración ocurrió en un monte alto y apartado llamado “Tabor”, que en hebreo quiere decir “el abrazo de Dios”.
Al comentar este relato del Nuevo Testamento, el Catecismo de la Iglesia Católica subraya que “por un instante, Jesús muestra su gloria divina, confirmando así la confesión de Pedro” así como también muestra que “para ‘entrar en su gloria’, es necesario pasar por la Cruz en Jerusalén”.
Por su parte, el Papa Francisco explicó, durante un rezo del Ángelus en 2018, que este evento protagonizado por Jesús “nos hace comprender mejor también su Resurrección” porque “si antes de la Pasión no se nos hubiera mostrado la transfiguración con la declaración por parte de Dios, ‘Este es mi hijo amado’, la Resurrección y el misterio pascual de Jesús no habría sido fácilmente comprensible en toda su profundidad”.
“De hecho, para comprenderlo, es necesario saber con anterioridad que aquel que sufre y que es glorificado no es solamente un hombre, sino que es el Hijo de Dios, que, con su amor fiel hasta la muerte, nos ha salvado”, añadió entonces el Papa.
Un año después, en 2019, el Santo Padre escribió en su cuenta oficial de Twitter @Pontifex_es que “en la Transfiguración Jesús nos muestra la gloria de la Resurrección: un vistazo al cielo en la tierra”.
Y en 2020, el Santo Padre dijo al finalizar una Audiencia General que “al emprender esfuerzos para sanar el mundo de hoy y construir el Reino de Dios, no podemos olvidar la exhortación que viene de Dios: ‘Este es mi hijo, mi amado, escúchenlo’”.