En una entrevista publicada este lunes 29 de enero en el diario italiano La Stampa, el Papa Francisco comparte, entre otros temas, cómo fue la “campaña” que definió su elección en el cónclave de los cardenales realizado en marzo de 2013.

Al recordar su elección en marzo de 2013, el Santo Padre relató que después de intervenir en la congregación general con los cardenales, antes del cónclave, “se dio un aplauso, inédito en ese contexto”. “Pero yo no había intuido lo que muchos me revelaron luego: ese discurso fue mi ‘condena’”.

El Papa recordó luego que al salir del aula del sínodo se encontró con “un cardenal de lengua inglesa que me vio y exclamó: ‘¡Bello eso que ha dicho! Bello, bello. Queremos un Papa como tú’. Y no me había dado cuenta de la campaña que estaba naciendo para elegirme”.

"Hasta el almuerzo del 13 de marzo, aquí en la Casa Santa Marta, algunas horas antes de la votación decisiva, mientras estaba comiendo, me hicieron dos o tres preguntas ‘sospechosas’. Entonces en mi cabeza comencé a decirme: ‘Aquí está pasando algo raro’”.

“Sin embargo logré hacer una siesta. Y cuando me eligieron tuve una sorprendente sensación de paz dentro de mí”, compartió el Pontífice.

El 13 de marzo de 2013, a las 20:19 (hora de Roma), el Cardenal protodiácono, Jean-Louis Turan, le anunció al mundo que los cardenales reunidos en cónclave habían elegido al Cardenal Jorge Mario Bergoglio como nuevo Papa de la Iglesia Católica y que había asumido el nombre de Francisco, ante la ovación de la multitud que abarrotó la Plaza de San Pedro en el Vaticano.

La salud del Papa Francisco y cómo se siente hoy

Sobre su salud, el Santo Padre comentó que “hay algunos achaques, pero ahora va mejor, estoy bien”.

Entre los varias afecciones de salud del Pontífice están la reciente inflamación de los pulmones que lo afectó, la gripe, la cirugía para prevenir una obstrucción intestinal a mediados de 2023, la diverticulitis y el problema de la rodilla que le impide caminar normalmente y que lo hace usar bastón o silla de ruedas.

Al ser preguntado sobre una posible renuncia, el Papa Francisco responde que no es algo que considere, aunque “es una posibilidad para cada pontífice. Pero ahora no pienso en eso. No me inquieto”.

A la pregunta sobre cómo se siente hoy, el Papa Francisco respondió: “Me siento un párroco. De una parroquia muy grande, planetaria ciertamente, pero me gusta mantener el espíritu de párroco. Es estar en medio de la gente, donde siempre encuentro a Dios”.