CIUDAD DEL VATICANO -- Antes de que el Papa Francisco presida la Misa del 17 de noviembre por la Jornada Mundial de los Pobres, el Santo Padre bendecirá 13 llaves que representan las 13 viviendas en Siria que serán financiadas como acto de caridad durante el Año Santo 2025, dijo el Vaticano.
Famvin Homeless Alliance, una red de órdenes religiosas y organizaciones caritativas inspiradas en San Vicente de Paúl, dijo que las 13 llaves también representan los 13 países donde construirán casas para las personas sin hogar. Los países son: Chile, Costa Rica, Australia, Brasil, Camboya, República Centroafricana, Italia, Tonga, Senegal, Siria, Tanzania, Reino Unido y Ucrania.
La “Campaña de las 13 Casas” es un homenaje a San Vicente de Paúl y a su decisión en 1643 de utilizar una dotación del rey francés Luis XIII para construir 13 pequeñas casas cerca de la sede vicenciana en París para atender a niños abandonados.
El Papa Francisco inició la celebración anual de la Jornada Mundial de los Pobres en 2017. Tradicionalmente, ha incluido una Misa, un almuerzo con el Papa Francisco y atención médica para los pobres en la clínica dirigida por el Dicasterio para el Servicio de la Caridad.
Por lo general, la Clínica Madre de la Misericordia, situada bajo la columnata de la plaza, abre cuatro mañanas a la semana. Pero con la ayuda de médicos, enfermeras y técnicos de laboratorio voluntarios, estará abierta desde las 8 de la mañana a las 5 de la tarde del 11 al 16 de noviembre.
En la clínica se ofrecen regularmente vacunas contra la gripe y otras enfermedades, análisis de sangre y visitas a médicos generalistas, especialistas en medicina interna y dentistas. Entre los voluntarios adicionales figuran también especialistas en cardiología, ortopedia, oftalmología, dermatología, ginecología, oncología, urología, psiquiatría, gastroenterología y podología.
El Dicasterio para el Servicio de la Caridad también informó de que el Papa Francisco almorzará con 1.300 personas en el Aula de Audiencias Pablo VI del Vaticano después de la Misa. La Cruz Roja Italiana es el patrocinador de la comida este año.
Los padres vicencianos entregarán a cada uno de los invitados del Papa una mochila con alimentos y artículos de higiene personal.