El papa León XIV saluda a un niño desde el papamóvil mientras recorre la plaza de San Pedro en el Vaticano antes de celebrar una audiencia general jubilar el 8 de noviembre de 2025. (Foto CNS/Vatican Media)
CIUDAD DEL VATICANO -- La esperanza que proviene de la verdadera fe "rompe la cadena del mal", promoviendo el perdón y la justicia, dijo el Papa León XIV.
"Es una nueva fuerza que desconcierta a los orgullosos y derroca a los poderosos de sus tronos", dijo. "De esta manera, nace la esperanza".
En una audiencia jubilar en la Plaza de San Pedro el 8 de noviembre, el Papa León dio una bienvenida especial a los peregrinos del Jubileo del Mundo del Trabajo. La celebración estaba prevista inicialmente para el 1 de mayo, fiesta de San José Obrero, pero se pospuso debido al fallecimiento del Papa Francisco.
El Papa León habló a los asistentes a la audiencia sobre el beato Isidoro Bakanja, un mártir congoleño que murió en 1909 como consecuencia de las palizas que sufrió a manos de su jefe en la plantación de propiedad europea donde trabajaba. El hombre despreciaba a los cristianos y a los misioneros con los que el beato Bakanja tenía una estrecha relación.
Pero, al morir, el beato Bakanja dijo a los misioneros que había perdonado a su amo y que rezaría por él desde el cielo.
La lectura de las Escrituras en la audiencia fue de 1 Corintios 1, 26-27: "Tengan en cuenta quiénes son los que han sido llamados: no hay entre ustedes muchos sabios, hablando humanamente, ni son muchos los poderosos ni los nobles. Al contrario, Dios eligió lo que el mundo tiene por necio, para confundir a los sabios; lo que el mundo tiene por débil, para confundir a los fuertes".
Al escribir a los corintios, San Pablo quiere que comprendan cómo, con la muerte y resurrección de Jesús, la tierra puede asemejarse al cielo, dijo el Papa. "Les dice que consideren su vocación y vean cómo Dios ha reunido a personas que de otro modo nunca se habrían relacionado entre sí".
"Esperar es dar testimonio de que la tierra puede asemejarse verdaderamente al cielo" con justicia, paz y dignidad para todos, dijo el Papa. "Y este es el mensaje del Jubileo".
En sus comentarios en inglés, el Papa León dijo que el testimonio del beato Bakanja "nos recuerda que tenemos mucho que aprender de nuestros hermanos y hermanas perseguidos en África. Esforcémonos por seguir su ejemplo de perseverancia en la fe a pesar de cualquier persecución o rechazo que podamos enfrentar".
El trabajo debe ser "una fuente de esperanza y vida, que permita a cada persona expresar su creatividad y su capacidad de hacer el bien", dijo el Papa, pidiendo a los gobiernos y a las empresas que se comprometan a crear "oportunidades de empleo significativas que ofrezcan estabilidad y dignidad, garantizando sobre todo que los jóvenes puedan cumplir sus sueños y contribuir al bien común".
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Cindy Wooden es directora de Catholic News Service en Roma.