Categories: Vaticano

La esperanza es saber que Dios está cerca y que el amor triunfará, dice el Papa León

CIUDAD DEL VATICANO -- La esperanza cristiana no consiste en evitar el dolor y el sufrimiento, sino en saber que Dios da a las personas la fuerza para perseverar y amar incluso cuando las cosas salen mal, afirmó el Papa León XIV.

Cuando Jesús se dejó arrestar en el Huerto de Getsemaní, demostró que "la esperanza cristiana no es evasión, sino decisión", declaró el Santo Padre a miles de personas reunidas en el Aula Magna del Vaticano el 27 de agosto para su audiencia general semanal.

"La forma en que Jesús ejerció su libertad ante la muerte nos enseña a no temer el sufrimiento, sino a perseverar con plena confianza en el cuidado providencial de Dios", afirmó el Papa en su discurso a los angloparlantes.

"Si nos entregamos a la voluntad de Dios y entregamos libremente nuestra vida por amor al prójimo, la gracia del Padre nos sostendrá en cada prueba y nos permitirá dar fruto abundante para la salvación de nuestros hermanos", concluyó.
La persona de fe, afirmó el Papa, no pide a Dios "que nos libre del sufrimiento, sino que nos dé la fuerza para perseverar en el amor, conscientes de que la vida ofrecida libremente por amor nadie nos la puede quitar".

Jesús vivió cada día de su vida como preparación para el "momento dramático y sublime" de su arresto, su sufrimiento y su muerte, dijo el Papa. "Por eso, cuando llega, tiene la fuerza de no buscar una vía de escape. Su corazón sabe bien que perder la vida por amor no es un fracaso, sino que posee una misteriosa fecundidad. Como el grano de trigo que, al caer en tierra, no permanece solo, sino que muere y da fruto".

Naturalmente, dijo el Papa León, Jesús "se siente turbado ante un camino que parece conducir solo a la muerte y al fin. Pero está igualmente convencido de que solo una vida perdida por amor, al final, se reencuentra".

"En esto consiste la verdadera esperanza: no en tratar de evitar el dolor, sino en creer que, incluso en el corazón de los sufrimientos más injustos, se esconde la semilla de una nueva vida", dijo.

Tras pasar más de 90 minutos saludando a los asistentes en la sala de audiencias, incluyendo a decenas de parejas de recién casados, el Papa León entró en la Basílica de San Pedro, donde cientos de personas que no consiguieron un lugar en la sala observaban la audiencia y esperaban su turno para ver al Papa.

El Papa les agradeció su paciencia, la cual, dijo, "es señal de la presencia del Espíritu de Dios, que está con nosotros. Muchas veces en la vida, deseamos recibir una respuesta inmediata, una solución inmediata, y por alguna razón Dios nos hace esperar".

"Sin embargo, como Jesús mismo nos enseña, debemos tener esa confianza que solo viene porque sabemos que somos hijos e hijas de Dios, y que Dios siempre nos da la gracia", dijo el Papa. "No siempre nos quita el dolor, no siempre nos quita el sufrimiento, pero nos dice que está cerca de nosotros".

Share
Cindy Wooden

Tags: leon xiv