CIUDAD DEL VATICANO -- El Papa Francisco pidió a un grupo de periodistas italianos que eviten las noticias falsas y el amor al escándalo, incluso cuando cubran la Iglesia Católica y la próxima asamblea del Sínodo de los Obispos.
"Ayúdenme a contar este proceso como lo que realmente es, dejando atrás la lógica de los eslóganes y de los relatos prefabricados", pidió al grupo el 26 de agosto al aceptar el premio "È Giornalismo", que reconoce contribuciones destacadas al periodismo.
El Papa Francisco dijo al grupo que él entiende que "hablar de un 'sínodo sobre la sinodalidad' puede parecer algo difícil de entender, autorreferencial, excesivamente técnico, de poco interés para el público en general", pero todo el proceso, que comenzó en 2021 con sesiones de escucha a nivel local, nacional y regional "es algo verdaderamente importante para la Iglesia".
En un momento de la historia "en el que se habla mucho y se escucha poco, y en el que el sentido del bien común corre peligro de debilitarse", afirmó, "la Iglesia en su conjunto se ha embarcado en un camino para redescubrir la palabra ‘juntos’".
Todos los bautizados deben "caminar juntos, interrogarse juntos, responsabilizarse juntos del discernimiento comunitario, que para nosotros es oración, como lo fue para los primeros apóstoles: esto es sinodalidad", dijo el Papa al grupo.
La asamblea sinodal del 4 al 29 de octubre en el Vaticano, dijo, reunirá a obispos, sacerdotes, religiosos y laicos de todo el mundo con el propósito de "escuchar juntos, discernir juntos, orar juntos".
Mientras gran parte del mundo experimenta una "cultura de exclusión", dijo el Papa, la Iglesia puede modelar un camino mejor, uno en el que todos sean bienvenidos y nadie se haga eco de la oración del fariseo en el Evangelio de Lucas que dice: "Yo gracias Señor, porque no soy así, no soy así" en lugar de agradecer a Dios por sus dones.
El Papa Francisco explicó al grupo que San Pablo VI restableció el Sínodo de los Obispos al final del Concilio Vaticano II "porque se dio cuenta de que en la Iglesia occidental la sinodalidad había desaparecido, mientras que en la Iglesia oriental todavía tienen esta dimensión".
"Por favor, acostumbrémonos a escucharnos, a hablar, a no golpearse la cabeza por una palabra", sino que aprendamos "a escuchar, a discutir con madurez".
"Esta es una gracia que todos necesitamos para avanzar. Y es algo que la Iglesia hoy ofrece al mundo, un mundo a menudo tan incapaz de tomar decisiones, incluso cuando nuestra propia supervivencia está en juego", dijo el Papa Francisco.
La Iglesia Católica, afirmó, está "intentando aprender una nueva forma de vivir las relaciones, escuchándonos unos a otros para oír y seguir la voz del Espíritu".
"Hemos abierto nuestras puertas, hemos ofrecido a todos la oportunidad de participar, hemos tenido en cuenta las necesidades y sugerencias de todos", dijo el Santo Padre. "Queremos contribuir juntos a construir una Iglesia en la que todos se sientan en casa, en la que nadie quede excluido".
La Iglesia es para todos, dijo. "No hay católicos de primera, de segunda o de tercera, no. Todos juntos. Todos. Es la invitación del Señor".
