WASHINGTON -- El presidente de la Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos y el presidente del comité de política internacional de la USCCB expresaron su solidaridad y la de todos los obispos estadounidenses "con nuestros hermanos en el episcopado cubano, y con todos los hombres y mujeres de buena voluntad en Cuba".
Publicado a fines del 19 de julio, el comunicado reconoció "las protestas en curso en Cuba y entre la diáspora en los Estados Unidos".
El comunicado fue emitido por el arzobispo José H. Gomez de Los Ángeles, presidente de la USCCB, y el obispo David J. Malloy de Rockford, presidente del Comité de Justicia y Paz Internacional de la USCCB.
"Como declararon los obispos cubanos en su comunicado del 12 de julio, 'No se llegará a una solución favorable por imposiciones, ni llamando al enfrentamiento, sino por la escucha mutua, donde se busquen acuerdos comunes y se den pasos concretos y tangibles que contribuyan, con el aporte de todos los cubanos sin excepción, a la construcción de la Patria'", dijeron los dos prelados estadounidenses.
"Con el mismo espíritu que los obispos cubanos, instamos a Estados Unidos a buscar la paz que proviene de la reconciliación y el acuerdo entre nuestros países", dijeron el arzobispo Gómez y el obispo Malloy.
Miles de cubanos en La Habana y en otras 14 ciudades cubanas salieron a las calles el 11 de julio para protestar por las dificultades económicas, la falta de libertades básicas y el mal manejo del coronavirus por parte del gobierno cubano, dando lugar a las protestas expresando el nivel más alto de desilusión que se visto en la isla en décadas.
Esto se vio en casos como en una protesta callejera en el barrio de La Pequeña Habana de Miami a última hora de la tarde del 11 de julio. Las protestas continúan en Cuba y en los Estados Unidos.
Desde el 11 de julio, según los informes, el gobierno cubano ha respondido arrestando a personas, incluido el clero, no solo en las calles sino también en sus hogares. Hubo al menos una muerte confirmada después de que la policía disparara contra un hombre que participaba en la protesta contra el gobierno. El gobierno también ha restringido los servicios telefónicos y de Internet.
El arzobispo Gómez y el obispo Malloy dijeron que durante décadas la USCCB, "en conjunto con la Santa Sede y los obispos cubanos, ha convocado un compromiso cultural y comercial sólido entre los Estados Unidos y Cuba, ya que significa ayudar a la isla a lograr una mayor prosperidad y transformación social ".
"Rezamos para que Nuestra Señora de la Caridad, nuestra madre, vele por sus hijos en Cuba, y que, juntos, nuestros países puedan crecer en la amistad en aras de la justicia y la paz", dijeron.
El 20 de julio, el periódico The Wall Street Journal informó: "Se desconoce el paradero de cientos de manifestantes arrestados y otros se encuentran recluidos en régimen de incomunicación sin cargos nueve días después de que manifestaciones a nivel nacional sacudieron la nación caribeña".
"Más de una semana después de las manifestaciones sin precedentes, cientos de personas hacen fila frente a las comisarías de policía en toda la isla para preguntar por familiares desaparecidos", dijo el periódico.