El Cardenal Raymond Leo Burke ha presentado mejoría y dejó este 21 de agosto la unidad de cuidados intensivos (UCI), donde era atendido luego de que su condición se agravara a causa del COVID-19.

A través de un comunicado publicado este 21 de agosto, el Santuario de Nuestra Señora de Guadalupe en La Crosse (Estados Unidos), señaló que “la familia del Cardenal se complace en anunciar que a Su Eminencia se le ha retirado el respirador y dejará la UCI hoy, para regresar a su habitación de hospital”.

“Su hermana habló por teléfono con él esta mañana, y Su Eminencia le expresó su profunda gratitud por las muchas oraciones ofrecidas por él”, añadió.

El santuario, fundado por el propio Cardenal Burke, indicó que la familia del Purpurado “pide que continuemos esas oraciones por su completa y rápida recuperación”.

“Ellos están agradecidos con Dios por la excepcional atención médica que ha recibido el Cardenal de los dedicados médicos y enfermeras que lo siguen asistiendo”, señala.

El Cardenal Burke confirmó el 10 de agosto que dio positivo a COVID-19. Cuatro días después su salud empeoró y tuvo que ser hospitalizado y conectado a un respirador.

La recuperación del Purpurado ha motivado diversas expresiones de alegría y gratitud a Dios.

Entre ellas la del Arzobispo de San Francisco (Estados Unidos), Mons. Salvatore Cordileone, que publicó en Twitter: “Alabado sea Jesús. Dios bendiga a los médicos y enfermeras”.

“Gracias por sus oraciones. Sigamos rezando”, dijo.