Obispos y líderes católicos de Estados Unidos compartieron diversas declaraciones y elevaron sus oraciones ante la audiencia, realizada este miércoles 1 de diciembre, del caso Dobbs vs Jackson Women’s Health Organization, sobre una ley del estado de Misisipi que prohíbe el aborto luego de las 15 semanas de gestación.

Los argumentos a favor de la ley, y que fueron expuestos esta mañana en la Corte Suprema, rebaten directamente el fallo de Roe vs Wade, que en enero de 1973 legalizó el aborto en Estados Unidos.

“En Estados Unidos el aborto se toma las vidas de más de 600 mil bebés cada año. El caso Dobbs vs Jackson Women’s Health podría cambiar eso”, indicó el Arzobispo de Baltimore, Mons. William Lori, en una declaración.

El Arzobispo, que es además jefe del Comité de Actividades Provida del Episcopado, elevó sus oraciones para que la Corte Suprema “haga lo correcto y permite a los estados que limiten o prohíban el aborto”.

Al hacer eso, dijo el Prelado, el fallo “protegería a millones de niños por nacer y a sus madres de esta norma dolorosa que destruye la vida”.

“Invitamos a todas las personas de buena voluntad a defender la dignidad de la vida humana, uniéndose a nosotros en oración y ayuno por este importante caso”, dijo.

Mons. Earl Boyea, Obispo de Lansing, ofreció un día de oración y ayuno en su diócesis, que incluye adoración Eucarística, el rezo del Rosario, Misa, y el rezo de la coronilla de la Divina Misericordia en la catedral local.

“La campaña para abolir el aborto es, en sus raíces, una batalla espiritual entre una civilización del amor y una cultura de muerte”, dijo por su parte Jenny Ingles, director del ministerio de fertilidad y vida de la Diócesis de Lansing.

El Arzobispo de San Francisco, Mons. Salvatore Cordileone, pidió en su cuenta de Twitter que “por favor recen por la Corte Suprema y por estas mujeres que necesitan nuestro amor y apoyo”.

Mons. Cordileone es un claro defensor del derecho a la vida de los no nacidos y ha alentado especialmente la oración por la congresista Nancy Pelosi, una católica de su diócesis que apoya el aborto.

Mons. Thomas Tobin, Obispo de Providence, también pidió oraciones en Twitter. “Este es un momento de definición para nuestra nación. ¿Continuaremos destruyendo vidas inocentes de niños no nacidos y explotaremos a mujeres vulnerables, o promoveremos una verdadera cultura de la vida?”, cuestionó.

El P. Dan Beeman, sacerdote de la Diócesis de Richmond, pidió a la Corte Suprema “hacer lo correcto y respetar toda vida humana”.

El director de evangelización, catequesis y escuelas en la Arquidiócesis de Detroit, P. Steve Pullis, subrayó en Twitter: “Pongan fin a Roe y construyan una cultura de vida”.

El 18 de noviembre los obispos de Estados Unidos acogieron una oración ecuménica en vistas a la audiencia del caso Dobbs vs Jackson. Entre los participantes estuvo el Arzobispo de Kansas City, Mons. Joseph Naumann, quien dijo que los fieles deben “rezar, ayunar y trabajar más duro para poner fin a esta pandemia del sacrificio de niños”.

Los expertos en leyes afirman que el caso Dobbs vs Jackson presenta una oportunidad ideal para que la Corte Suprema reconsidere fallos previos que promovieron el aborto legal a nivel nacional.

Las decisiones en casos importantes en la Corte Suprema suelen darse al final del término anual, que podría darse en este caso a finales de junio o a principios de julio de 2022.

Traducido y adaptado por Walter Sánchez Silva. Publicado originalmente en CNA