Los Ángeles es rica en museos. Este es uno que quizá te hayas perdido: el Forest Lawn Museum, que se presenta como "un pequeño museo en un cementerio con exposiciones cambiantes centradas en el arte religioso e histórico".
Del 19 de octubre al 11 de febrero de 2024, puedes ver allí una exposición llamada "La Reina de Los Ángeles".
Que la Reina de Los Ángeles sea la Virgen de Guadalupe, patrona de las Américas y venerada en toda la comunidad mexicana y más allá, es lo más apropiado.
La exposición presenta el trabajo de Nydya Mora, de 34 años, angelina de nacimiento y bibliotecaria juvenil con formación en planificación urbana, que también posee un amor feroz por su familia y su ciudad.
Desde 2012, ha estado tomando fotos informales de las innumerables encarnaciones de la Virgen que salpican los barrios de Los Ángeles.
Creció rodeada de esas imágenes. En el salón de la casa de su madre todavía hay un gran relicario de la Virgen de Guadalupe: "¡Es deslumbrante!", ríe Mora.
De hecho, la idea de recopilar imágenes surgió de su visión inicial de una especie de libro de sobremesa que esperaba complaciera a su madre.
Fotografía del "Mural de la Virgen de Guadalupe en Gómez Electrodomésticos", de Nydya Mora, 2020. (Imagen de cortesía)
¿Por qué la Virgen de Guadalupe es tan universalmente querida?
"Creo que representa muchas cosas para mucha gente. Infunde un sentimiento de esperanza, especialmente en comunidades de inmigrantes o históricamente marginadas en las que la gente no se siente capacitada o envalentonada para recurrir a formas oficiales de protección, o que no tienen medios económicos para comprar, por ejemplo, cámaras de seguridad: negocios familiares, comunidades residenciales escondidas. En ese sentido, es un faro de esperanza y protección".
"Para mí, representa mi cultura. Representa el orgullo cultural y social, mi educación".
Así, aparece en Gomez Appliances en South Central LA, en Lupita's Market en E. Hubbard Street en East LA, rodeada de una falange de guitarras en Mariachi Plaza.
La Virgen de la Autopista, visible desde la 101, adorna un lugar en la pared norte de la catedral del centro. Aparece en taquerías, carnicerías, salones de tatuajes, camiones de comida y desguaces. Se instala en las ventanas de las escuelas, junto a las puertas traseras, detrás de las vallas de seguridad, bajo las celosías de madera, en paredes de bloques de hormigón, estuco, chapa ondulada y azulejos.
Algunas imágenes están pintadas a todo color, con túnicas verdeazuladas moteadas de estrellas. Otras son meras sugerencias, un contorno nimbado en blanco y negro. Las estatuas se cubren con cuerdas de luz o se adornan con velas votivas, espumillón y guirnaldas. Los murales se erigen como centinelas solitarios en las esquinas de las calles del centro de la ciudad.
Puedes ver muchas de las imágenes en la página de Instagram de Mora, Virgens de Los Ángeles, @virgensdela. La cuenta tiene más de 13.000 seguidores. Mora también ofrece un mapa de Google de sus capturas de la Virgen de Guadalupe.
Se define a sí misma como documentalista más que como fotógrafa.
La mayoría de las imágenes están tomadas con su teléfono, y todo el enfoque de bricolaje, sobre la marcha, informal y hogareño encaja perfectamente con el espíritu de las propias obras.
Considera el proyecto su carta de amor a Los Ángeles.
"Siempre ha sido un proyecto muy íntimo para mí. Empezó en mi teléfono. Sigue siendo mi teléfono. Todo es tan casual. Ahí está". "
Son obras de verdadero arte popular. Cada homenaje a La Virgen es una expresión única. Cada uno es un pequeño recuerdo urbano, un testigo, un tesoro. Cada una es un emblema, de algún modo, de exuberante esperanza.
Algunas de las imágenes son icónicas: "La semilla de la Virgen", de Paul Botello, por ejemplo, pintada en 1991. "Esa está en el este de Los Ángeles. Parece como si estuviera ardiendo y brillando. Es realmente impresionante".
Pero en la mayoría de los casos nadie sabe quién creó el mural, la escultura o la pintura. Algunos están firmados con un número de teléfono que generalmente culmina en un callejón sin salida: el número ha cambiado o el teléfono está desconectado.
Las imágenes son únicas y efímeras. Las pintan, las derriban, las lavan, las destruyen.
Sin embargo, la Virgen siempre resucita y aparece bajo nuevas formas. Cuando Mora empezó, los hallazgos eran casi siempre fortuitos. Ahora la gente suele enviarle pistas, así que sus búsquedas de imágenes son un poco más intencionadas.
"Empecé a salir activamente, a tomar calles de superficie en vez de autopistas. Desde que tengo coche, voy de un lado a otro de Los Ángeles. A veces cojo Rosecrans desde Paramount, donde crecí y aún tengo familia".
Una cosa es segura. Nunca se le va a acabar. Las imágenes están por todas partes.
Desde que la página de Instagram despegó, montones de amantes de la Virgen se han puesto en contacto con ella. "La gente me dice: 'Oye, hay una aquí' y 'Hay una en casa de mi vecino'. Ha sido realmente fenomenal contar con esta comunidad de apoyo".
Forest Lawn también se puso en contacto a través de Instagram: "Oye, ¿estás interesado? Creemos que tu contenido sería perfecto para una exposición". Mora estaba encantada. Su madre también.
Su trabajo como fotógrafa está estrechamente relacionado con su labor como bibliotecaria de la Biblioteca Pública de Los Ángeles. "Voy a eventos comunitarios para poner en contacto a los miembros de la comunidad que no pueden acceder a la biblioteca por una razón u otra. Ayudamos a acercarles los servicios y recursos de la biblioteca".
Al igual que la biblioteca, la Virgen de Guadalupe es para todos. Mora tiene seguidores de todo el mundo: Brasil, Japón. Bajo ese manto azul, la Virgen alberga a toda la humanidad.
Pero reconozcámoslo: tiene un corazón especial para Los Ángeles.
"La Virgen crea un lugar para la cultura. Y la cultura crea un lugar para ella".
